34 emisoras de radio cumplen un año de su cierre por Conatel‏

Gobierno insiste en mutilar a uno de los sistemas de comunicación más importantes del país

La radio en Venezuela no ha dejado de evolucionar, son muchos los protagonistas, las voces y los precursores de las múltiples alternativas que este medio de difusión ofrece, sin embargo, el Gobierno Nacional insiste en mutilar a uno de los sistemas de comunicación más importantes de nuestro país

El “Día de la Radiodifusión” se conmemora hoy 06 de junio y se inicia, en Venezuela, en 1926, bajo el gobierno del general Juan Vicente Gómez, cuando comienzan las transmisiones, que eran exclusividad de los allegados a su régimen. El director - gerente de la primera emisora radial, “AYRE”, era Luís Roberto Sholtz y el locutor oficial, Alfredo Moller.
Mucho ha avanzado la radio en nuestro país desde las primeras transmisiones de AYRE en las que los locutores leían el periódico y realizaban programas musicales utilizando discos y pianolas, pues hoy en día modernos estudios de radio sirven de centro de operaciones para la transmisión de noticias en vivo, programas de opinión, entrevistas y un sin número de actividades comunicacionales en las que el oyente siempre es el protagonista. Sin embargo, a pesar de este avance en la radiodifusión venezolana, el Gobierno Nacional parece estarse convirtiendo en la piedra de tranca de este desarrollo comunicacional, pues bien vale recordar que hace ya casi un año, se ordenó el cierre de más de 30 emisoras radiales a nivel nacional y todavía existe una amenaza latente sobre 200 estaciones más.

Sin concesiones
Como se recordará el 1ro. de agosto del 2009, El Ejecutivo Nacional decidió inhabilitar del uso del espectro radioeléctrico a 34 emisoras de radio y algunos canales de televisión mediante procedimientos administrativos, considerados “legales”, por el alto mando de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL). El ministro Diosdado Cabello fue el encargado de anunciar las emisoras que, a nivel nacional, perderían la concesión para operar bajo el espectro radioeléctrico y de hecho serían inhabilitadas durante cinco años, con las frecuencias liberadasentregadas a emisoras comunitarias. En estos procedimientos administrativos “legales”, CONATEL se basó en puntos como el fallecimiento del dueño, renuncia y el vencimiento de la concesión.
El Circuito CNB fue el más golpeado, sobre el cual se afincaron con el cierre de cinco emisoras de radio a nivel nacional: Punto Fijo CNB 96.1 FM, Valencia CNB 100.1 FM Valenciana, Maracaibo CNB 102.1 FM Zuliana 102, Rubio CNB 94.5 FM Tachirense y CNB 102.3 en Caracas.
“Tienen que apagar los transmisores inmediatamente”, sentenció Cabello en aquella oportunidad y advirtió que si los dueños de la estaciones trataban de defenderse “no les iba a servir de mucho”, como efectivamente sucedió, pues después de un año siguen cerradas y hay 200 emisoras más con un riesgo latente de llegar a semejante final. Tras la acción gubernamental, la asociación de radiodifusores “Somos Radio” denunció que el cierre de medios de comunicación cercena derechos fundamentales como el derecho al empleo, el derecho a la libertad de expresión y de elección y mostró su preocupación ante la amenaza de más cierres.

Haciendo historia
En 1928, hechos políticos hicieron que la pionera AYRE fuese clausurada y es el 09 de diciembre de 1930 cuando se inaugura la Broadcasting Caracas, fundada por William H. Phelps, dueño del “Almacén Americano”, un negocio especializado en la importación y venta de artefactos eléctricos. A partir de 1935, la emisora se convirtió en Radio Caracas. En este momento, también se produce un auge y durante los gobiernos de Eleazar López Contreras e Isaías Medina Angarita, se origina una legislación sobre el uso de los medios radioeléctricos: la Ley de Telecomunicaciones, aprobada por el Congreso Nacional el 12 de julio de 1940. El auge de la radiodifusión comercial atrajo rápidamente a la industria publicitaria. Empresas internacionales de publicidad fundan sucursales en el país y se crea una Asociación Nacional de Anunciantes (ANDA). Del mismo modo aparece una Cámara de la Industria de la Radiodifusión (1945), que defiende los intereses de las empresas del ramo. A principios de los noventa, Eli Bravo inauguró un estilo que revolucionó la radio juvenil y la cambió para siempre. El nuevo formato, que se apoyaba en la participación del público, los concursos y las caracterizaciones, también ofrecía naturalidad, espontaneidad y un toque de rebeldía que resultaba irresistible para los adolescentes. Este formato se adaptó también al público adulto que empezó a formar parte de los propios programas de radio. Hoy en día, ya no se trata de que la gente llame a las estaciones de radio para dar su opinión sobre determinado tema, ahora el escucha puede hacer denuncias, participar en concursos, cantar y hasta realizar reportes de tránsito y es por ésto que la radio ha logrado convertirse en compañera de sus seguidores.

Edda Pujadas


Fuente: La Región http://bit.ly/a90M3o

(Yimber Gaviria, Colombia)

Aunque la noticia aparece el dia 11 de Julio 2010


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