Consideró el presidente de la Cámara Venezolana de la Radiodifusión y de la emisora CNB, Nelson Belfort
Jesús Castro
Foto: Lisandro Casaña
El periodismo y los medios de comunicación en general han enfrentado en diversos períodos de la historia venezolana contemporánea retos prove- nientes del Gobierno Nacional de turno, pero, para Nelson Belfort, presidente de la Cámara Venezolana de la Industria de la Radiodifusión y del circuito radial CNB, ninguna fase fue tan problemática para los mass media venezolanos como la que ha conducido el actual presidente de la República, Hugo Chávez.
Belfort, ingeniero de profesión, pero comunicador por vocación familiar, señaló que la diferencia entre los problemas que enfrentan los medios de comunicación en la actualidad se deben a que la administración de Chávez no es democrática.
Para el entrevistado de la presente edición del Desayuno en la Redacción de Notitarde, la acción de abrir expedientes y posiblemente ordenar el cierre de 240 emisoras radiales y 45 televisoras (como avisó el titular del Ministerio para Obras Públicas y Vivienda -Mopvi-, Diosdado Cabello, en la Asamblea Nacional el 3 de julio pasado) no ocurriría en un régimen democrático. "Un Gobierno no cierra 240 estaciones de radio, abriría 240 emisoras y creería en la propiedad privada".
Parafraseando a quienes ya han expuesto la idea con anterioridad, para Belfort la intención de Chávez es transformar el espectro radioeléctrico venezolano en un "conuco", en donde hayan dos tipos de emisoras radiales y televisivas: las que están totalmente signadas por la ideología chavista, o las que callan y no informan elementos que puedan afectar al Gobierno.
"Yo no estoy viendo agresiones sólo a la radio, sino un ataque directo y frontal contra todos los medios de comunicación social, es contra la libertad de expresión y todo aquel que piense diferente al Gobierno", expresó el invitado.
Fue así como se inició la disertación sobre la actual situación que atraviesan los medios de comunicación en el país entre Belfort y los periodistas Felipe González, Jesús Castro y el reportero gráfico, Lisandro Casaña, en la oficina del radiodifusor ubicada en la sede de su emisora CNB, en Caracas.
"El Gobierno no sólo aísla, quiere acabar la información"
Belfort indicó que "la radio y demás medios de comunicación siempre han estado perseguidos por los entes gubernamentales porque manejan información y opiniones que no les gusta", pero agregó que ha sido en los últimos años cuando ha visto ataques más insistentes y por diferentes vías contra los trabajadores comunicacionales.
Consultado sobre el motivo que lleva al Gobierno a impulsar una medida como el posible cierre o imposición de multas a 240 emisoras, Belfort señaló que el objetivo no es únicamente aislar a los medios, sino acabar con la información, ya que ésta le puede resultar inconveniente.
Agregó que todos los espacios que desea tomar el Ejecutivo Nacional serían ocupados por estaciones gubernamentales que serán "tan prósperas como lo fueron los gallineros verticales".
El presidente del gremio radial afirma que las intenciones gubernamentales no se quedan en posesionarse de los espacios, sino que se trata de un tema de fondo, que atañe a todos los actores de la sociedad, porque el objetivo real de estas acciones es disminuir la libertad de expresión.
Expresó que el ministro Cabello, mediante las acciones que realiza la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel, ente adscrito al Mopvi recientemente), "venía básicamente enfocado hacia la información".
Especificó Belfort que la medida que propone el Ejecutivo Nacional para restringir a 30 minutos el tiempo en los cuales los circuitos radiales puedan transmitir los mismos contenidos, está pensado para afectar el flujo informativo, lo cual habría sido evidenciado al plantear que tal medida no afectará a los eventos deportivos.
Belfort subraya que una acción como la anteriormente descrita iría en contra de la audiencia principalmente, ya que no podría estar realmente enterada de lo que sucede en el país. Asimismo, indicó que no todas las emisoras o grupos radiales cuentan con el dinero o estructura para poseer corresponsales en todo el país.
Recalcó que al Ministro "en cuatro días se le ocurrió cambiar el modelo de negocio" de las radios, con el propósito de "hacerlas caer" en los intereses gubernamentales.
Además, rememoró que el anuncio del proceso contra las 240 estaciones radiales y las 45 televisoras, no se hizo solo, ya que desde días atrás integrantes del Gobierno Nacional han anunciado otras acciones que podrían limitar la libre expresión y el trabajo periodístico.
Belfort pidió recordar que, además del anuncio de Cabello, se adelantan reformas a la Ley de Telecomunicaciones, de Periodismo e incluso una posible que versaría sobre los "Delitos Mediáticos" con lo cual, a juicio del entrevistado, el ataque se incrementará para disminuir o acabar con la emisión de mensajes que no convengan a los poderes públicos.
Igualmente, dijo que paralelamente al anuncio que perjudica a las emisoras de radio, también se originaron las medidas contra emisoras y televisoras que colocaron en sus programaciones propagandas de Cedice y Asoesfuerzo, por referirse a la protección del derecho a la tenencia de propiedad privada.
"Tú pretendes hacer pasar por democrático algo que no lo es, eso es siempre difícil y en cada minuto, con cada declaración se ve el fondo del asunto", exclamó Belfort.
Agregó que el ataque también va hacia la televisión por cable, "los dólares para el papel de los periódicos están escasos, los ingresos están por el piso para todos (...) los servicios no los paga el Estado como hace con RNV o VTV (...) Y seguro después irán por internet".
Listado de 240 emisoras: una "espada de Damocles"
Ante el desconocimiento, para el momento de la realización de la entrevista, de la lista de las 240 estaciones de radio que, según el Mopvi, deberán ser objeto de investigaciones para determinar si deben ser cerradas o multadas, Belfort indicó que puede convertirse en una "espada de Damocles" para que "se negocie con cualquier emisora, incluso sobre sus principios" y no emitan contenidos inconvenientes para el Gobierno.
"Quien sabe si se pueden cambiar los nombres de las emisoras que se pensaban debían estar en la lista de las 240 el primer día", agregó.
Aunque reconoció que Cabello corrigió a final de la semana que recién culmina sus declaraciones ofrecidas en la Asamblea Nacional el 3 de julio de este año, cuando señaló por primera vez las posibles acciones contra las 240 emisoras, indicó que la apertura de procesos administrativos abre una "barbaridad de posibilidades, que pueden ir desde medidas pecuniarias altísimas hasta donde ellos (el Gobierno) lo quieran enfocar".
Añadió que con estas medidas de presión coloca en jaque a las emisoras. En este ámbito "nadie se puede sentar a negociar, porque me puedes obligar a tratar de modificar mis principios. Si lo que queremos es promover la radiodifusión, bienvenido; pero si me dices 'cambia tus ideas, adscríbete a la revolución o te reviento con estas medidas', ya no es diálogo, es otra cosa".
"Cabello está contra la libertad de expresión"
Belfort comentó que Cabello "sorpresivamente le quitó Conatel al Ministerio de Telecomunicaciones y la pasó al de Vivienda e Infraestructura, para hacer un trabajo quirúrgico de acabar con la libertad de expresión e información".
"En 15 días montó un censo o una actualización de datos, con todos los vicios del mundo, y en siete días hizo un diagnóstico contra 240 emisoras que hasta el día de hoy no se conocen cuáles son. Entonces el que tenga ojos que vea", añadió Belfort.
Agregó que el término acuñado por el oficialismo sobre el "latifundio mediático" en Venezuela es irreal. Explicó que la radiodifusión en Venezuela es plural, "no estamos hablando de 4 ó 5 dueños de las emisoras, sino de 27 grupos que poseen el 32 por ciento de las radios, uno es monopolio, tres oligopolio, øpero a 27 cómo se le llama?".
Explicó que se "necesita una economía de escala en los medios para poder operar, obtener información, tener equipos, periodistas y personal. Se requieren muchos recursos, si lo conviertes en conucos de cinco radiodifusores por estación te va a pasar que no vas a poder tener información o coordinar eventos deportivos ni tener una producción acorde, porque los costos de venderla no dan. A juro necesitas las cadenas, ese es el otro atentado directo".
"Si no es mediante ese modelo no se podría montar un informativo nacional; que si se desea llevar una conversación a toda Venezuela, tenga que pasar por 400 estaciones de radios, 20 televisoras, 50 periódicos, porque humanamente no es posible para nadie. Si hay una huelga en Guayana porque algo pasó allá, el que no viva en el sitio no se enteraría de nada".
Medios oficiales poseen las cadenas más extensas
El presidente del gremio radial también se mostró contrario a la reforma que llevaría a cada circuito tener sólo 3 estaciones por grupo.
Al respecto indicó que sería una imposición que atentaría contra el negocio de las ondas hertzianas venezolanas, así como contra la posibilidad de elección del oyente.
Pero recalcó que existe una contradicción entre la propuesta del Ejecutivo Nacional contra las emisoras privadas, frente a las públicas ya que "el Gobierno tiene muchos medios directos de comunicación". Recordó que "Radio Nacional de Venezuela posee 3 ó 4 señales, Venezolana de Televisión es una cadena de 40 estaciones y TVes posee 45 estaciones".
Añadió que varias de estas emisoras, como TVes, han sido asumidas por el Gobierno bajo la promesa que quedarían en manos del pueblo, pero para Belfort esto no ha sido así y la audiencia lo ha reconocido.
Por lo cual "cuando la gente no te quiere escuchar, y sí lo hace con los privados, tienes dos alternativas contra los demás medios: le obligas a decir lo que tú quieres que se diga nada más, o los compras".
Agregó Belfort que el Gobierno "en vez de hacer crecer el espectro radioeléctrico, prefieren quitar, ya que no les alcanza su aparataje comunicacional brutal de 80 emisoras encadenadas, 5 televisoras nacionales, cable, con publicidad comprada selectivamente y al ver que no puede contra los medios privados, entonces se decide a destruir los que quedan".
Gremio irá por el camino legal
En cuanto a las acciones que se deben realizar contra los anuncios del Mopvi, Belfort indicó que el primer paso debe andar por el camino legal para plantar batalla ante las posibles sanciones que recaigan sobre las 240 estaciones de radio que, según el entrevistado, equivalen al 40 por ciento del total de emisoras existentes en el país.
"Hay que ponerlo en el contexto: éste es un ataque hacia la libertad de expresión", subrayó Belfort y recordó que "en el caso particular de los cierres de medios Chávez ha acusado recibo de estas acciones, ya que el caso de Rctv obtuvo 80 por ciento de rechazo (...) Supongo que la radio irá por un camino similar al de Radio Caracas. No es una opción no defenderse -dijo Belfort- hay que seguir escalando y agotar todas las instancias legales", aseveró.
Indicó que el gremio siempre ha sido muy unido, "pero es un pedacito muy pequeño del país, hay que entender que esto es un ataque contra la radiodifusión y los medios en general".
Expresó que debido a que la actual "embestida" es legal, se debe reaccionar legalmente, pero Belfort llamó a tomar conciencia de lo que sucede en el país y la disminución de las libertades.
"En esta primera etapa se pueden volar 240 estaciones de radio, luego en 2010, 150 emisoras más, y en el 2011 ya no quedarán sino cinco o seis", alertó el radiodifusor.
"Estoy seguro que saldremos de esto, pero no sé cuándo. No hay mal que dure cien años", afirmó Belfort, a la vez que se debe impedir que la audiencia pierda opciones para elegir cuál emisora quiere escuchar. Dijo esperar que los grupos políticos que se reunirán con la OEA esta semana planteen la situación de los medios en Venezuela y sigan sumándose apoyos contra las medidas gubernamentales.
"Aló, Ciudadano no es de la oposición"
Belfort señaló que el "Aló, Ciudadano", programa transmitido por CNB, la emisora de su propiedad no pertenece a la oposición, lo califica como "un espejo de la realidad" y agregó que en un principio le decían que era oficialista porque aceptaban invitaciones los dirigentes gubernamentales, pero ahora lo llaman opositor. Mantiene que nunca le ha rendido cuentas a ningún sector político específico.
Hegemonía comunicacional versus libre pensamiento
Belfort recordó que desde la época de Willian Lara en el Ministerio para Comunicación e Información se comenzó a cerrar el acceso a los contenidos gubernamentales para los medios, lo cual se acentuó durante la gestión de Andrés Izarra en tal despacho.
Fue precisamente Izarra quien planteó la existencia de la "Hegemonía Comunicacional, lo cual para Belfort no es más que un solo mensaje, por un solo canal, todo manejado por la instancia oficial".
Con la instauración de la Hegemonía Comunicacional los medios privados quedan como un estorbo, lo cual es un absurdo porque debes estar expuesto a todas las ideas, no debes tener miedo".
Ventana
Ondas hertzianas van en la sangre
Felipe González Roa
Nieto de radiodifusor. Hijo de radiodifusor. Las ondas hertzianas fluyen por la sangre de Nelson Belfort Istúriz.
"La radio es mi día a día. Es el centro de lo que me he dedicado en los últimos años, intensamente", sentencia.
Su abuelo, Antonio José Istúriz, mejor conocido como El Catire, fue uno de los pioneros de la radiodifusión venezolana. A los 21 años era locutor, y en 1951, antes de cumplir los 30 años, ya había adquirido Radio Ondas Porteñas, en Puerto La Cruz.
El Catire dedicó toda su vida a las ondas hertzianas, y, en Caracas, fue el propietario de Radio Tropical y Radio Cultura, la cual, convirtió en YVKE Mundial.
Lamentablemente, Istúriz murió joven, a los 54 años, pero sus pasos los siguió su yerno, Nelson Belfort Yibirín, "un tipo bien progresista", según lo define su hijo.
Belfort Yibirín, ingeniero eléctrico con posgrado en Electrofísica, en 1982 asumió la presidencia del sistema Súper Radio, el cual, a comienzos de los años 90, convirtió en el Circuito Nacional Belfort (CNB), que dirigió hasta su fallecimiento en un accidente de tránsito en el 2002.
Al igual que su abuelo y su padre, Belfort Istúriz ha estado estrechamente vinculado a la actividad gremial, y actualmente es presidente de la Cámara Venezolana de la Radiodifusión, cargo que ocupará hasta el 2011 luego de ser reelecto recientemente.
Ingeniero eléctrico de profesión, egresado de la Universidad Simón Bolívar, con posgrado en Administración de Empresas, Belfort Istúriz expresa su satisfacción por los avances experimentados por CNB.
Casado, con tres hijos, se confiesa un apasionado por la electrónica, su verdadero hobby. También reconoce que le gustaría que alguno de sus niños siguiera los pasos de la familia en el mundo de la radio, aunque recalca que lo principal es que ellos sean felices.
"La educación es lo mejor que uno le puede dar a un hijo. Porque uno le puede regalar un nintendo y después se le rompe. La educación es lo primordial para mi. Estoy seguro que ellos van a tomar la decisión que gusten", comenta.
Fuente: NotiTarde. http://www.notitarde.com/desayuno_redaccion/index.html
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